Parece que nos hemos librado de tener que indemnizar a los dueños de la gasolinera de Tabaza. Esa es el único motivo de alegría de esa noticia.
El resto sigue siendo el que ha sido hasta ahora. Actuación temeraria del ayuntamiento al hacer oídos sordos al dictamen de los técnicos lo cual originó meternos en un proceso largo y costoso. Pero a mí lo que más me ha molestado de todo esto han sido "las clases a tiempo real" que hemos recibido de cómo eludir la Ley. Y gracias a esas clases, lanzo una pregunta ¿si Agustín Iriondo hubiese puesto su casa a nombre de su hijo, hubiese peleado tanto el ayuntamiento para "legalizar" su situación y evitar el derribo?. Lo pregunto porque tanto en el caso de la gasolinera como en el de Agustín Iriondo, quienes metieron la pata hasta el fondo fue el ayuntamiento. Pensarlo.
Publicado por Moderadora
Poe este motivo pediais dimisiones y ahora resulta que no se tira,unas disculpas no estarián de más.
ResponderEliminarPor favor, léete bien el post...
ResponderEliminarAdemás, cuando se tienen mil motivos para dimitir, el que queden 999 no es motivo para disculparse. Quien debería hacerlo es el que ha ocasionado esos 999.
Buenos días.
No olvidemos que la licencia era ilegal, y para legalizarla, la gasolinera tiene que dejar de vender gasolina al público. El hecho sigue siendo el mismo: una licencia con tres informes en contra.
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