En el post anterior digo que a Amelia le han pillado en algo muy grave.
Bueno, pues tenemos el Acta de la Sesión Ordinaria donde se debatió el tema de la desafección y permuta de caminos en el Alto de Aboño.
Leer las páginas de la 7 a la 13. Pero antes ir a por el orinal. Menudo nivelazo, jajajajajaja.
Ya quisiera Amalia tener las espaldas tan cubiertas siempre como en este tema. Ningún voto en contra del acuerdo en el pleno, a alguien le ha llegado un papel del Defensor del Pueblo con un sello de admisión y ya se esta haciendo pajas debajo de un guindo.
Pues así mirándolo por alto me encuentro esta joyita:
El Sr. Secretario solicita intervenir, cediéndole la palabra la Presidencia.
Sr. Secretario: “Yo quería decir una cosa, porque estamos haciendo una deriva, para advertiros que un día nos vamos a encontrar con una sorpresa, porque las justificaciones de las urgencias se requieren de forma individualizada y para cada asunto. Os quiero decir que aquí en el Pleno normalmente se vienen teniendo dentro de un tratamiento flexible las cosas, que todo es urgente, está bien, pero que sepáis que lo que exige la norma es que se haga la justificación individualizada para cada urgencia y se justifique por qué se trata en este Pleno y no se puede tratar en el siguiente”.
Sra. Alcaldesa: “Pues lo hacemos uno a uno. No hay inconveniente”.
Es decir, que el secretario también está hasta los mismísimos de esta panda de mamarrachos. De juzgado de guardia!!
Toma ya. Y todavía se creerá política de primer nivel.
Las intervenciones de Gabriel no tiene desperdicio. Ver por escrito esa forma de expresarse da vergüenza ajena. Estoy segura de que a Amelia también le da.
En cuanto acaba de leer lo que lleva escrito es hombre al agua, da pena oírlo, pero ya se encarga la alcaldesa de mandarle algún was en el pleno para que el ridículo sea menos ridículo
Lo grave no es que ese hombre no sepa hablar, ni tenga vocabulario, lo grave es que es colaborador activo de unas políticas nefastas para el conjunto de la sociedad.
Ya quisiera Amalia tener las espaldas tan cubiertas siempre como en este tema.
ResponderEliminarNingún voto en contra del acuerdo en el pleno, a alguien le ha llegado un papel del Defensor del Pueblo con un sello de admisión y ya se esta haciendo pajas debajo de un guindo.
Pues así mirándolo por alto me encuentro esta joyita:
ResponderEliminarEl Sr. Secretario solicita intervenir, cediéndole la palabra la Presidencia.
Sr. Secretario: “Yo quería decir una cosa, porque estamos haciendo una deriva,
para advertiros que un día nos vamos a encontrar con una sorpresa, porque las
justificaciones de las urgencias se requieren de forma individualizada y para cada asunto.
Os quiero decir que aquí en el Pleno normalmente se vienen teniendo dentro de un
tratamiento flexible las cosas, que todo es urgente, está bien, pero que sepáis que lo que
exige la norma es que se haga la justificación individualizada para cada urgencia y se
justifique por qué se trata en este Pleno y no se puede tratar en el siguiente”.
Sra. Alcaldesa: “Pues lo hacemos uno a uno. No hay inconveniente”.
Es decir, que el secretario también está hasta los mismísimos de esta panda de mamarrachos. De juzgado de guardia!!
El secretario se cubre las espaldas.
EliminarY ojo a como las justifica: porque no dio tiempo.
ResponderEliminarToma ya. Y todavía se creerá política de primer nivel.
Las intervenciones de Gabriel no tiene desperdicio. Ver por escrito esa forma de expresarse da vergüenza ajena. Estoy segura de que a Amelia también le da.
Pintais la cosa de este concejal como arquetipo de persona inculta, habrá que acercarse a algún pleno a oirle.
EliminarHombre, si es el que nos da la brocha... tendremos que pintar, vamos, digo yo ¿no?.
EliminarEn cuanto acaba de leer lo que lleva escrito es hombre al agua, da pena oírlo, pero ya se encarga la alcaldesa de mandarle algún was en el pleno para que el ridículo sea menos ridículo
EliminarLo grave no es que ese hombre no sepa hablar, ni tenga vocabulario, lo grave es que es colaborador activo de unas políticas nefastas para el conjunto de la sociedad.
ResponderEliminar