Fábricas de conserva;
paredes de piedras viejas,
vigas que no aguantaron
por el peso de sus tejas.
Muros que se impregnaron
de lamentos y de quejas,
cimientos que resistieron
ligados con cal y pena.
Tan sólo quedan recuerdos
de alguna mujer morena
con artrosis en sus manos
y perfume de salmuera.
Como le duele a la historia
cuando se siente ignorada.
Como resquema la herida
de batirse en retirada,
viendo tu pueblo dormido
con la nariz atrofiada;
que ya no echa de menos
ni el olor de la fritada
¡¡Que insulto, que vejación!!
conformarse con la feria
de ofertas y promoción.
No quiero que nadie vea con en mi escrito tintes publicitarios con las fotos y mis palabras sólo pretendo rendir un pequeño homenaje a todos los hombres y mujeres que con su esfuerzo y trabajo lograron hacer que Candás fuera en otro tiempo una de las más importantes villas conserveras del norte de España.
A su vez mostrar mi indignación por la impasibilidad con que se afronto el exterminio de este peculiar sector.
EL DIAÑU BURLÓN
Diañu, mientras quede en este pueblo alguien con la sensibilidad que tú has demostrado, no todo estará perdido. Y si somos capaces y siempre juntos, podremos resurgir del poco en el que nos han metido.
ResponderEliminarUn saludo
Perdón, "pozo" no "poco"
ResponderEliminarEstimado "El Diañu Burlón", este comentario está un poco fuera de este post pero es que me revienta que en el anterior post de Rosanna, vengan diciendo que una fábrica de conservas no pueda estar en medio del pueblo por sus olores y que tendría que estar en un polígono industrial. Cuando se construyo la fábrica en 1895 no creo que hubiera tantos señoritos que encima presumen de marineros.
ResponderEliminarCandaxu, acaso no recuerdas todos los negocios que habia en Santarua hace 40 o 50 años? O solo recuerdas la huerta de Chicula? Era lo mas parecido a un poligono industrial, haz memoria. Los que vivimos en Candas esos años o mas recordamos mejor esos tiempos que lo que paso hace diez dias.
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