Sancho Panza

De todos es sabido, que las AAVV de cualquier lugar, pueblo o ciudad, deben de ser la primera expresión colectiva de la reivindicación ciudadana, ya que eson el embrión, donde nacen los derechos y deberes colectivos.
En muchos casos sus dirigentes suelen ser personas honradas y sencillas, que siente esa innata preocupación por el bienestar de la sociedad, pero en otros muchos, esta realidad se distorsiona buscando distintos fines.
¿Y a que viene esto¿ -os preguntaréis- ¿Que pasa contigo tío? ¿De que vas tú, jilipollas? ¿Que quieres darnos lecciones¿, ¡!capullo¡¡.
Tenéis razón, pero disculparme, es que no sabía como empezar, y esta es la única forma que se me ocurrió, para comentar algo de las AAVV, que casi nunca son culpables de las estupideces de sus Representantes, Consejeros, Juntas Directivas, o como carajo se llamen.
Existe una, de cuyo nombre no quiero acordarme, pero, ¡!coño¡¡ siempre me acuerdo, porqué su nombre rezuma amistad, compañerismo, camaradería, afecto, y uno se siente bien, muy bien, cuando advierte que los movimientos ciudadanos como este, son una garantía, para un pueblo. Pero luego viene la segunda parte, cuando la analizas, cuando la observas en profundidad, y comienzas a darte cuenta de que en esa asociación no todo va bien, que algo está fallando, y tus expectativas comienzan a romperse en mil pedazos ante el hecho consumado, de la falta de transparencia, de autocrítica, de garra y fuerza, y sobre todo, cuando uno o más golfos meapilas comienzan en nombre de esa AAVV a buscar un hueco de complacencia entre nuestra inculta y sosa clase política.
Desde mi punto de vista (tan discutible como otro cualquiera) estas asociaciones, terminan siendo el refugio de frustrados personajes o personajillos, que en otras organizaciones no encontraron un ambiente favorable, ni gentes llanas y sencillas a las que manejar y manipular a su antojo, para lograr un beneficio propio.
Por regla general, estos redomados golfos demagogos (bueno, demagogos pocos, solo los rebotados políticos) a los que me refiero, siempre buscan estar en lo más alto de cresta, no soportan ser segundones, precisamente porque en la organización de la que vienen, posiblemente lo eran.
Estos depredadores sociales, al final terminan siendo peligrosos, porque con su absoluta carencia de escrúpulos son capaces de mentir, fantasear, desnaturalizar, falsear, embaucar, !! Uf, no sigo¡¡ estaría poniendo adjetivos hasta mañana, así que, todos estos los aplicaré a uno de estos representantes de AAVV que es amigo de todo un pueblo como Candas, pero estoy seguro que en este caso siempre me faltaría uno.
Y como siempre me gusta llegar al final, sin terminar las cosas, pues unamos todo esto, y observemos que nos faltaría la madre del cordero, es decir, el egocentrismo y quizás el narcisismo, como colofón de la estupidez humana.
De la estupidez no estaría yo tan seguro, ya que es mucho más peligroso un inbecil que un malicioso.
Y después de decir todas estas cosas, con las cuales hoy, si puedo decir, que quedé a gusto, muy a gusto, no os diré quien es el personaje oculto, porque solo un puñado de sus directos colaboradores, no serán capaces de saber a quien me refiero, los demás se que lo tenéis tan claro como yo
Un vecino de Carreño.

Nos ha quedado super claro Vecino de Carreño. Tu descripción concuerda a la perfección con "ese presidente de asociación enemiga de Candás" que tanto ayuda a... quienes son de su cuerda.
Moderadora