Denuncia vecinal

He recibido este e-mail:

Hola, buenos días: esto es una duda, que no sé si como propietaria de perro me podrías aclarar. Me dicen que está prohibido ir con perro por la senda costera entre Perlora y Xivares. ¿Cómo es que puedo pasear mi perro por pueblos y ciudades, y no puedo pasear por una senda verde? No entiendo nada.Esto dicho por la policía local, que estuvo pidiendo documentaciones a dueños e identificaciones de los animales, actuando en plan "informativo", porque alguien llamó para denunciar que "había mucho perro por allí", pero disuadiendo a paseantes bajo amenaza de denuncia y multa para la próxima que pillen a alguien in fraganti. Qué razón tienes cuando dices que las personas de 4 patas nos dan mil vueltas a las de 2.

Como le he prometido, he llamado a la Policía Local porque encontrar la normativa en la web del ayuntamiento es como encontrar una aguja en un pajar.
Me dicen que, efectivamente, está prohibido pasear perros por esa senda costera. A mi pregunta de cual era el motivo de la prohibición me han contestado, textualmente, que por allí van personas andando, en bicis, en patines, etc. Le he dicho que por esa regla de tres tampoco se puede pasear a un perro por las calles de los pueblos y ciudades. Silencio. Le insisto en que me de una razón lógica para poder entenderlo puesto que un perro es un animal de compañía y en una senda verde es donde mejor se le puede pasear, por supuesto, sin molestar a nadie como tampoco deben molestar las personas que van en bicis o en patines. Su respuesta ha sido que es una orden del ayuntamiento y que hay puestas placas de prohibición.
He finalizado la conversación diciéndole que cualquier día nos prohíben respirar.
Y he colgado con la sensación de que este ayuntamiento no tiene nada de humano ni por supuesto de divino. Tan solo sabe prohibir lo que en otros sitios se fomenta: la armonía del hombre con su animal de compañía para divertirse ambos en aquellos espacios verdes preparados para el disfrute sin que ninguno de los dos, ni hombre ni perro sea molestado o moleste al resto de paseantes.
Y aquí insisto y seguiré insistiendo como lo hice cuando defendí el poder alimentar a los gatos callejeros que todo, absolutamente todo pasa porque se respete el derecho del resto de humanos a tener las calles, los praos, las sendas y todos los espacios libres, limpios, sin rastro ni de excrementos, ni de restos de comida.
Podemos vivir en armonía seres humanos y animales siempre y cuando nos respetemos todos.
Y como la explicación que me han dado no se sostiene por ninguna parte, un día de estos pasearé con mi perrín por esa senda y espero que me pongan una multa. Me tendrán que decir ante los tribunales qué mal he cometido. Porque hay normas justas y normas denunciables. Y esta es una de ellas.
Publicado por Moderadora