Ayer no quise ponerla porque me parecía que ya estaba bien de malas noticias. Pero nunca he tenido alma de avestruz y siempre he pensado que esconder la cabeza no sirve mas que para sentirte cobarde.
Las empresas asturianas se marchan dejando en Asturias un panorama desolador de paro y miseria. Un panorama no solo de presente, si no también de futuro.
Me ha entristecido leer como para la prensa este hecho es positivo "¡Asturias se lanza al mundo!" y se quedan tan orgullosos.
Pero que Asturias se lance al mundo significa que los puestos de trabajo que deberían ocupar los asturianos los ocuparán los chinos, los japoneses, los brasileños, los argelinos... Empresarios que van buscando mano de obra más barata aún que la que hay en Asturias, pensando solo en su rápido enriquecimiento y sabiendo que dejan detrás a un batallón de asturianos sin posibilidades de sobrevivir.
Me hace gracia, por decir algo, esos viajes de Arces a países imposibles, tratando, según él, de atraer a Asturias inversores, inversores que ni han venido ni vendrán por muchos millones que se siga gastando el "guaje", mientras por la puerta de atrás se le escapa la industria autóctona.
Buen ejemplo está dando este tipo de como se gobierna una comunidad autónoma. Por un lado se gasta nuestro dinero y por otro deja que las empresas emigren.
Ahora que alguien me diga qué futuro le espera a Asturias y ojalá para alguno, no sea tan negro como yo lo veo.
Y ahora que pienso ¿para qué hemos hecho un superpuerto si ya no va a quedar nada que exportar?.
Publicado por Moderadora
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