Hace falta ser imbécil, primero para autodenominarse “presidente”
y segundo para ridiculizar a dos diputados cuando no hay sapo más feo y
analfabeto que el. Al margen de los “trastos” que le tira al socialista.
Este tiene hambre pero no encuentra el choped, jajajajajaj.
Me das asco chaval. Asco físico, bueno, repugnancia. Y asco
político.
Ahora sí que estoy convencida que el hemiciclo se ha
convertido, con la llegada de esta banda, en un circo y además con demasiados
payasos.
Pablo Iglesias desvela en la sesión de investidura que a
Andrea Levy, del PP, le gusta el podemista Miguel Vila y les ofrece su despacho
para un encuentro
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