Me refiero a los vecinos de Carrió que siguen soportando la inutilidad de ayuntamiento de Carreño. Prometieron hace tiempo realojarles. Pero como todas las promesas que hicieron e incluso hacen, se ha quedado en aguas de borrajas.
A la contaminación que soportan diariamente, se une el ruido de la térmica que, como ellos dicen, hay veces que ni nos oímos.
Y a esto también se unen los fallos que esas industrias contaminantes tienen de vez en cuando. Como en esta ocasión que un ruido ensordecedor les despertó en plena madrugada.
Lo triste es que seguís creyendo sus mentiras en forma de promesas incumplidas.
Alcalde ¿que tal vivir un par de años en Carrió para que tengas así una visión real del problema?. No hay narices.
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