miércoles, 1 de agosto de 2012

¡Iros a la MIERDA sotaneros!

Hay que tener muy poca vergüenza, MUY POCA, para pedir esfuerzos cuando ellos se están LITERALMENTE tocando los cojones a dos manos y viviendo de puta madre.
Y como me venga alguien diciendo que soy una mal hablada ¡que le den! porque no serlo sería un pecado.

2 comentarios:

  1. Igualito, igualito que los peperos y sociatas, les arrimas a los de IU, CIU, etc. y verás lo mismo ellos pidiendo esfuerzos y paciencia pero ni se ponen ERES, ni rebajas de salarios, ni jotas ni pitos ni flautas

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  2. Tranquila fía ya sabes que “quien no llora no mama” y ellos lleven mamándola dos mil años y picu, estos, mas los otros que había antes de esi famosu Jesus. Nun te asustes bobina, son así de afayaizos. Probitinos, con lo bueninos que son, tol día tan pidendo, pidendo y pidendo Yo creo que lo hacen pa non gastar de lo suyo, de lo que tienen ahorrao, con lo probes que son ¡Me caso con Dios! ¡Además cuestayos mucho ganalo! ¡como van gastalo! Pues mira, ya verás como alguien suelta les perres, como eses santurrones que veo yo todos los días, to pal cepu, to pal cepu. Ya sabes bobina, yo voy a misa, porque mi má me lo enseño, y me dijo, que ye un pecau muy gordu nun ir. Coño y también pa fisgar ¿Como elles! Que pienses tú, que van a rezar, que inocente yes. Además, que yo sepa los curas quieren rezos que ye lo que también quier Dios, y lo que ellos prediquen, porque…perres, perees si Dios nun pue cojeles ¿Quien coyones y les guarda?
    A mí no me engañen amiguina. Beata y rezona sí ( bueno hasta que me casé) pero tonta, tonta, tanto como tonta… Eso no lo cree nadie, y, fíjate bien lo que te digo: ¡¡Ni Dios me engaña!! Rediós que burra soy, va castigame.
    Así que tranquila fia “que a to gochin le llega su san Martin” díctelo Maruja “la Felpeya” (Ye que ni ma metía toda la mierda de bajo el felpudu, por eso a mí quedome “la felpeya”)
    ¡Ye la segunda vez que entro en esti rolllu y pienso pasalo de puta madre, como en la luna de miel¡ Bueno, tanto, tanto no, porque después de diecinueve días en Lluanco en casa el mi primu Gervasio, y quinientes noches en casa, el mi Manolo, probe ¡¡QUERIA METESE A FRAILE¡¡

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