Grande SEÑORA

Una de las pocas que alberga españistán. Me refiero a SEÑORA con mayúsculas.

Un escrito suyo que viene a cuento ahora:

Triste España que mendigas

Para que un trozo que crees tuyo no se vaya.

Intentas retener enviando a sus ciudades guardias civiles armados.

Haciendo creer a tus ciegos seguidores, que esta tierra catalana rebosa desordenes.

Mientras sus cívicos seguidores os reciben con flores, permitís que vándalos exaltados vitoreen oles y oles a gritos feroces.

Contra un pueblo que decís que es vuestro pueblo, y sus gentes vuestras gentes.

Terrible vivir con el corazón partido, esta experiencia que lleva años y años avisando.

Ciegos cuantos políticos por distintas etapas pasaron, queriendo acallar a golpes de transferencias las bocas de tan solo unos cuantos.

A esos a los que poco les importa la gente, la tierra ni la bandera. Solo sus miles de euros escondidos entre oscuras fronteras.

Patética españa partida en trocitos que ya no quedan, y quieren hacernos creer que en ese descosido hay unión y una sola bandera.

Por dios que el universo se ilumine y por fin con calma y con cordura reconocer de una vez que al pasado hay que enterrarlo, pero no en las cunetas.

Que todos sabemos bien que allí en muchas de ellas, todavía hay miles de almas que esperan justicia y nobleza.

De esa bandera rojigualda que os tiene tan comida la cabeza, dejar que se ventilen las distancias igual que los corazones.

Dejar que la expresión de cada cual sea libre, enviar mensajes y no pelotones de hombres y de mujeres que a más de uno seguro, se les hiela hasta la sangre.

Teniendo que cumplir órdenes avasalladoras contra sus propios principios morales.

Sentaos y hacer debates, venir a Catalunya y escuchar por todos lados, no es una locura el que queramos separarnos.

Hasta los que aquí no nacimos, nos sentimos muchas veces maltratados.

Hora es ya que el país abra los ojos y se instale en el momento actual.

Que atrape a los corruptos, que recupere el dinero que entre todos nos han robado.

Este país ya es indigno desde el momento que sostiene un gobierno imputado.

Y los españolitos siguen tan tranquilos tapeando, bebiendo cañas y vitoreando.

Catalunya, este pequeño país al que queréis tapar la boca, hace muchos años que aprendió que con constancia y unión no nos derrotan.

Y por muchas trabas que impongáis, el camino ya está trazado, preferimos recibiros con alegría, sonrisas y cánticos.

Evitaremos verborreas, mentiras, manipulaciones y todo vuestro fango.

Antes que arrodillarnos por los más corruptos que pretenden doblegarnos.

En Barcelona, antes del 1 de Octubre, poema para esta españa terrible, de una Castellano-Manchega, según me recordó alguien ayer, pero muy catalana en el alma y en el corazón.

- Lola Herrera